Debate: ¡APOYAR A LAS GUERRAS POPULARES Y LUCHAS ARMADAS EN EL MUNDO COMBATIENDO Y APLASTANDO AL REVISIONISMO Y AL OPORTUNISMO! La situación presente en el movimiento comunista internacional y en los diferentes países donde se desarrollan guerra popular y lucha armada bajo la bandera del maoísmo, hace aún más urgente la necesidad de lucha de dos líneas ideológica y política. En primer lugar, nos reafirmamos en los principios del internacionalismo proletario, y más específicamente en el Presidente Gonzalo, el pensamiento gonzalo y el Partido Comunista del Perú, su Comité Central y todo su sistema de dirección partidaria; consecuentemente apoyamos y luchamos por el inicio y desarrollo de guerra popular en todos los países del mundo, lo cual naturalmente incluye la revolución en India. Una victoriosa guerra popular en India – aplastando el viejo Estado, arrojando a los imperialistas y aplastando la semifeudalidad y el capitalismo burocrático, llevando a cabo la revolución de Nueva Democracia, estableciendo el nuevo poder como dictadura conjunta de las clases revolucionarias bajo la dirección del proletariado, y después sin intermedio ninguno continuando con la revolución socialista bajo la dictadura del proletariado con revoluciones culturales hasta el comunismo – sería un gran triunfo importante para el proletariado internacional. Lo más pronto que tal triunfo se realice, mejor, y por eso es la obligación de todos los comunistas y revolucionarios, como expresión de nuestro internacionalismo proletario, apoyar a nuestros camaradas en India. Sin embargo, insistimos en que ese apoyo no puede y no va a servir a la victoria del proletariado y el pueblo de la India sino se basa en principios, es decir los principios del marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente el maoísmo. Si el apoyo internacional a la revolución de la India busca rehuir la crítica y el debate, evitar la lucha de dos líneas contra el revisionismo y el oportunismo, y en lugar de tal lucha aplica la tesis revisionista de que la conciliación lleva a la unidad (“dos se unen en uno”), en realidad no sirve en absoluto al proletariado y al pueblo, sino solamente defiende los intereses de algunos “dirigentes”, y más importante, sirve a los planes contrarrevolucionarios del imperialismo y la reacción. Es una característica de revisionistas, y en particular de los nuevos revisionistas de hoy, que evitan la lucha en toda forma posible. Son ellos que cuando las diferencias se presentan y las contradicciones se agudizan, prefieren simplemente irse, capitular totalmente o formar todo tipo de nuevos grupos y organizaciones. Los oportunistas van a seguir y apoyar cualquier partido o movimiento que en el momento tiene más armas o más publicidad en la prensa burguesa – porque están tan ansiosos por un triunfo rápido, tan ansiosos por asegurar roles importantes para ellos mismos como “grandes personalidades” en el periodo de sus vidas, esperando conseguir puestos. Los comunistas no debemos caer en esta trampa. Debemos estar preparados para la guerra prolongada, para largos años de lucha, y entender que sí la línea ideológica y política no es correcta, nuestros triunfos en realidad no serán en ningún modo triunfos.
La situación de la guerra popular en el Perú y la importancia del Presidente Gonzalo en el mundo La importancia del Partido Comunista del Perú y de la guerra popular en el Perú para el movimiento comunista internacional y la revolución proletaria mundial es innegable y ha sido ampliamente reconocida: fue por el Presidente Gonzalo y su línea roja que la primera guerra popular se inició en el mundo después del golpe revisionista en China, y fue el Presidente Gonzalo quien definió el maoísmo como tercera, nueva y superior etapa del marxismo. Con el desarrollo de la guerra popular en el Perú, ésta ganó un apoyo masivo entre el proletariado internacional y los pueblos oprimidos, e inspiró a los comunistas en muchos países a asumir el maoísmo e iniciar la lucha armada. No es raro entonces, que la reacción mundial consideró al PCP y su Jefatura como una amenaza grave que querían destruir utilizando cualquier medio. Porque habían aprendido de sus errores anteriores, el enemigo entendió que no era suficiente simplemente matar a los comunistas y el pueblo revolucionario del Perú (aunque hicieron todo lo que pudieron para hacer eso también). El imperialismo yanqui y sus lacayos reaccionarios en Perú concibieron la patraña de los “acuerdos de paz”, con la esperanza de 1) difamar al Jefe de la revolución peruana y 2) transformar al PCP en un partido legal, burgués y revisionista, un partido maoísta solo de membrete, integrado en su propio sistema de explotación y opresión. Eso era importante para ellos, no solamente para “salvar” al Perú de la revolución, sino, quizás más importante, para “salvar” al mundo de la influencia peligrosa del Presidente Gonzalo y el PCP a nivel mundial. ¿Fueron exitosos en eso? ¿Fueron capaces de aniquilar la guerra popular en el Perú, la línea roja del Presidente Gonzalo y su influencia en el mundo? Como sabemos, el PCP ha continuado aplicando el pensamiento gonzalo y no ha detenido la guerra popular ni un segundo, y su influencia en el mundo ha seguido jugando un papel importante como un ejemplo a seguir en la formación de Partidos maoístas y el inicio de luchas armadas revolucionarias en varios países. Sin embargo, también es un hecho que el enemigo si pudo infligir gran daño y golpes duros contra la revolución peruana, y hoy el PCP sigue dirigiendo la guerra popular bajo circunstancias difíciles. También sabemos que el plan del enemigo a nivel internacional ha sido parcialmente exitoso en lograr el aislamiento del PCP, principalmente porque los nuevos revisionistas siguieron el juego de este plan perfectamente, haciendo precisamente lo que los imperialistas querían – y siguen haciéndolo hoy. Una parte de eso fue intentar socavar y dividir al organismo generado del PCP para el trabajo partidario en el extranjero – el MPP – y en eso los nuevos revisionistas han jugado también un papel importante. La LOD y la patraña de “acuerdos de paz” en Perú fue un plan piloto, y después de su aplicación en Perú pasaron a hacer lo mismo en Nepal; y no hay duda de que intentan hacer lo mismo en otros países. Para lograr eso, fue necesario, y sigue siendo necesario para el imperialismo, la reacción y el revisionismo aislar al PCP del resto del MCI, desacreditando al Presidente Gonzalo, al PCP y su línea ideológica y política. Entonces, a la luz de lo anterior, ¿que significa cuando algunos “grupos de solidaridad” en el mundo organizan campañas de apoyo a las guerras populares en India y Filipinas etc., pero no mencionan nada sobre Perú? ¿Qué significa cuando algunos intelectualoides supuestos defensores del pensamiento gonzalo repiten las mismas mentiras difundidas por la reacción – que “el PCP ya no existe” y que “ahora solo hay fracciones que compiten”? (y los camaradas de India deben conocer bien este tipo de patraña de la reacción en su propio país). Y además, ¿Qué significa cuando las mismas personas se llaman apoyantes de la revolución en India, pero no dicen ni una palabra sobre las contribuciones del Presidente Gonzalo, ni una palabra sobre el compartir las experiencias del Perú con los Partidos y organizaciones de otros países? Así como los viejos revisionistas rechazan el maoísmo con el argumento que Teng y sus seguidores del camino capitalistas fueron capaces de tomar el poder en China (supuestamente demostrando que “el maoísmo no sirve”), los intelectualoides de hoy rechazan el pensamiento gonzalo con el argumento de que éste es la causa de la supuesta “derrota” de la guerra popular del Perú. Y así como estos viejos revisionistas rechazan la Gran Revolución Cultural Proletaria, diciendo que fue nada más que una “lucha por poder personal”, los intelectualoides ahora proclaman que “el PCP ya no existe” y que el PCP y su Comité Central solo es una entre varias fracciones en una lucha por poder personal. El hecho de que algunos de estos intelectualoides se presentan como “defensores” del pensamiento gonzalo solo hace su oportunismo más descarado. Su cobarde llamada critica, su demanda de que el Partido debió haber expulsado o aniquilado a los renegados oportunistas (la LOI), comparte el argumento del revisionista Hoxha contra la Gran Revolución Cultural Proletaria, es decir la idea revisionista del Partido monolítico. Es claro que esa “critica” fue nada más que un pretexto para justificar su propia capitulación y oportunismo. Enfrentando una situación difícil, prefirieron tomar la “salida fácil”, formando sus nuevos grupillos para convertirse en supuestamente prestigiosos dirigentes de organizaciones de “solidaridad” pequeño burgueses, conciliarse con el revisionismo y así servir a los planes del enemigo. Ver como estos autodenominados dirigentes, sin principios, ahora buscan aliados por todas partes, desesperadamente buscando con que “fracción” colaborar en su intento de socavar al PCP y su Comité Central. Quizás han encontrado lo que estaban buscando en el fenómeno de Internet que se llama base del PCP, y que ahora dice que la LOD y la LOI son “desviaciones que tienen que alinearse con la línea del Partido”. La posición del PCP es lucha a muerte contra la LOD y la LOI y contra toda capitulación. “Aun cuando la línea de dirección de la revolución sea correcta, es imposible garantizar completamente que no se sufran ciertos reveses y sacrificios en el curso de la revolución. Pero, siempre que se mantenga firmemente una línea correcta, la revolución se coronará finalmente con la victoria”. (Polemica acerca de la línea general del movimiento comunista internacional, Partido Comunista de China 1965) Los viejos anti-maoístas y los nuevos revisionistas, grupillos y intelectualoides de hoy tienen una cosa en común: todos sus argumentos son nada más que pretextos para justificar su propio oportunismo; su voluntad de seguir a quien en este momento movilizan más masas, o tienen más armas, o gozan de más reconocimiento de intelectualoides burgueses – porque se preocupan más de su propio prestigio y su sueño de tener un papel importante, como individuos, en “grandes eventos” en el lapso de sus propias vidas. Decimos ¡No! El hecho de que el enemigo consigue infligir daño, el hecho de que hay obstáculos y dificultades en el camino de la revolución, no significa que nuestra línea sea errónea. Al contrario, las experiencias de la guerra popular en Perú y de otros países confirman la validez universal del maoísmo, así como la validez de su aplicación a la revolución peruana, el pensamiento gonzalo. Además, la presente situación en el MCI confirma que las advertencias del Presidente Gonzalo y el PCP sobre los problemas ideológicos y políticos en el MCI y en el MRI eran correctas, es decir sobre las aspiraciones hegemonistas del PCR-USA y Avakian, y sobre la línea revisionista en Nepal. Aquellos que enarbolaron a Nepal como la supuesta “nueva antorcha de la revolución mundial” y tildaron al PCP de “dogmatico” porque asumió la lucha contra ese revisionismo, ahora “de repente” han entendido lo evidente, que los dirigentes del partido nepalés son un puñado de revisionistas que no sirven a nadie más que a sí mismos y al imperialismo. ¿Pero hemos escuchado alguna autocrítica de estos camaradas? Una vez más, los oportunistas no aplican el método maoísta de crítica y autocrítica, sino el método revisionista de conciliación y lucha sucia.
El plan imperialista de “acuerdos de paz” Basándose en las experiencias del Perú con la patraña de “acuerdos de paz”, la LOD y el hecho de que ésta fue un plan concebido y dirigido por el imperialismo yanqui, y basándose en el análisis de la situación internacional, el PCP estableció que existe hoy un plan mundial imperialista de “acuerdos de paz”, con la cual esperan aniquilar toda lucha armada revolucionaria, especialmente las que están dirigidas por Partidos maoístas, convirtiéndolos en maoístas “domesticados”, es decir organizaciones legales burguesas que se concilian con la reacción, participan en elecciones y se hacen parte del viejo sistema de explotación y opresión (o se convierten en revisionistas armados haciendo la lucha armada para “presionar” al viejo Estado para obtener una parte de su poder, como vemos en conexión con la LOD y la LOI en Perú). Para lograr eso, esperan que viejas posiciones revisionistas ganen influencia dentro del movimiento revolucionario: la vieja teoría de “transición pacífica”, la vieja calumnia de “culto a la personalidad” etc. En pocas palabras, el imperialismo quiere imponer lo siguiente a los movimientos revolucionarios:
Por supuesto, estas ideas ya han devenido en principios sagrados para todos los viejos revisionistas en el mundo y una gran parte de las masas que movilizan (especialmente en los países imperialistas). Pero a través de partidos como el PCR-USA y su líder, definidos como nuevos revisionistas, estas ideas ahora están también siendo difundidas entre aquellos que se llaman maoístas. ¿Qué es la “nueva síntesis” de Avakian sino precisamente las ideas presentadas en el párrafo anterior? ¿Qué es la línea de Prachanda y los demás revisionistas nepaleses sino la aplicación de estas ideas bajo el manto de maoísmo? Y guiados por estas ideas, los nuevos revisionistas quieren formar su llamada “nueva internacional” para imponer las mismas ideas en todo el mundo. Si nosotros los comunistas y revolucionarios no reconocemos que este plan existe, y si no lo condenamos y aplastamos clara y firmemente, dejamos la puerta abierta de par en par para que el revisionismo cumpla los objetivos de este plan. Mientras algunos pueden condenar a los traidores revisionistas y sus “acuerdos de paz” en Nepal, sin embargo aún defienden la “posibilidad” de acuerdos de paz en otros países (y justificando ello refieren a “acuerdos de paz” anteriores en la historia del MCI – los cuales tomaron lugar en circunstancias totalmente diferentes). En el mundo de hoy, cuando el imperialismo está debilitado por su crisis final y sus contradicciones internas, y cuando ha lanzado su plan de “acuerdos de paz” para acompañar su represión y genocidio en marcha contra los pueblos revolucionarios – como dice el PCP: ¡Aquí, así como en todo el mundo, no cabe capitulación, acuerdos de paz, ni tregua alguna!
Sobre la revolución en la India Cuando vemos la situación actual de la revolución en la India, debemos hacerlo a la luz de los hechos mencionados anteriormente. Si queremos que se desarrolle una guerra popular victoriosa en la India, tenemos que basar nuestra posición en los principios del MLM y llevar a cabo la lucha ideológica y política para conjurar el revisionismo y el oportunismo. Es desde este punto de partida que expresamos nuestras preocupaciones en cuanto a la revolución en la India y algunas de las posiciones expresadas por los camaradas de India. Parte del problema es precisamente la falta de voluntad de debatir abiertamente, y el hecho de que hay pocos documentos del Comité Central del PCI(M) que expresen posiciones claras sobre los puntos urgentes mencionados anteriormente. Lo que si hay son muchos documentos, o entrevistas y pronunciamientos de dirigentes individuales que expresan posiciones más generales pero evitan los puntos de discusión más urgentes. En gran medida, las declaraciones del PCI(M) se encuentran en libros y artículos de los intelectuales burgueses en los cuales los camaradas de India aparentemente confían para publicar sus posiciones. En general, parece que el movimiento internacional de apoyo a la revolución en la India se basa en gran medida en el apoyo de tales intelectuales burgueses y en el trabajo de “solidaridad” pequeño burgués. Mientras tales intelectuales burgueses y/o pequeño burgueses, como el autor sueco Jan Myrdal o la autora hindú Arundhati Roy, podrían servir muy bien a la causa de la revolución proletaria si los comunistas son capaces de manejar correctamente este tipo de apoyo, también sirven a objetivos revisionistas y reaccionarios en otras circunstancias. Para tomar el ejemplo de Myrdal; sus informes de China de los años 60 y 70 jugaron un papel positivo, pero eso no significa que él es comunista o de alguna manera revolucionario. Desde el golpe revisionista en China, nunca ha rechazado o condenado clara y firmemente a Teng y sus seguidores; de hecho, su único comentario sobre la masacre de Tienanmen en el 89 fue que era “comprensible” y “necesario”, para no hablar de sus posiciones sobre el camarada Stalin y sobre los revisionistas de Yugoslavia. Hoy, cuando uno de los puntos de discusión más urgentes en el MCI es precisamente la cuestión de Nepal y la posición en cuanto a “acuerdos de paz”, el PCI(M) no ha tomado una posición clara. El documento más reciente que expresa la posición del PCI(M) sobre Nepal es de 2009, y aunque éste si condena la línea revisionista en Nepal, lo hace expresando posiciones que hacen el juego al enemigo. Por ejemplo: “’La lucha contra el dogmatismo’ ha devenido en una frase de moda entre muchos revolucionarios maoístas. Hablan de descartar principios “anticuados” de Lenin y Mao y de desarrollar el MLM en las “nuevas condiciones” que dicen han surgido en el mundo del siglo 21. Algunos de ellos describen su esfuerzo de “enriquecer y desarrollar” el MLM como nuevo camino o pensamiento, y aunque eso al comienzo se describe como una cuestión limitada a la revolución de su país en cuestión, inexorablemente y rápidamente va a asumir “carácter universal” o “significancia universal”. Y en este ejercicio, dirigentes individuales son glorificados y hasta deificados al grado que parecen infalibles. Tal glorificación no ayuda al funcionamiento colectivo de los comités del Partido y el Partido en su conjunto, y las cuestiones de línea casi nada se plantea porque vienen de un dirigente individual que es infalible. En tal situación es extremamente difícil para el CC, para no hablar de los cuadros, luchar contra una desviación grave en la línea ideológica-política, o en la estrategia y táctica fundamental, aun cuando está plenamente claro que va en contra de los intereses de la revolución. El “culto del individuo” promovido bajo el nombre de camino y pensamiento da cierto grado de impunidad a la desviación en la línea si viene de este dirigente individual. (Carta abierta al Partido Comunista Unificado de Nepal (Maoísta) del Partido Comunista de India (Maoísta), 2009) Aquí, los camaradas de India toman el rechazo justo y correcto de la línea revisionista en Nepal como un pretexto para enarbolar las aplastadas tesis de Avakian para rechazar también el principio de la aplicación creativa del maoísmo a las condiciones de cada país, y repetir la vieja tesis revisionista de "culto a la personalidad", que es una parte central de la ofensiva contrarrevolucionaria del imperialismo en el mundo. Es decir la misma tesis que fue utilizada para atacar al socialismo en la URSS, luego para atacar al Presidente Mao, la Revolución Cultural y el maoísmo, y en la actualidad para atacar a la guerra popular en Perú y al Presidente Gonzalo con el fin de evitar que inspiren a los comunistas y revolucionarios en otros países . La pregunta es, ¿los camaradas de India consideran que el Presidente Mao, y el pensamiento Mao Tse-Tung, la aplicación creadora del marxismo-leninismo a las condiciones de la revolución china, también fueron un ejemplo de "culto del individuo" o "glorificación" que “no [ayudaron] en el funcionamiento colectivo de los comités del Partido y el Partido en su conjunto"? Y cuando su carácter universal como maoísmo fue establecido por el Presidente Gonzalo, consideran los camaradas de India que ello es un error? En lo que se refiere al pensamiento gonzalo, el PCP nunca ha afirmado que tenga carácter universal. Sin embargo, sí establece que contiene aportes universales a la ideología universal del proletariado internacional, y el PCP ha insistido y sigue insistiendo en debatir esas contribuciones con los Partidos en todo el mundo en un debate abierto y honesto, basado en hechos objetivos. El PCI (M) continúa evitando discutir esos puntos, por el contrario los descarta por completo a través de declaraciones de carácter general como la anterior. Por otra parte, mientras que aparentemente el PCI (M) si rechaza la participación del partido de Nepal en el parlamento burgués, sigue considerando que los "acuerdos de paz" son un método útil en la India, y aparentemente se niega a defender esa posición en la lucha de dos líneas dentro del MCI. Los documentos de la CPI (M) y sus representantes en repetidas ocasiones expresan la posición de que la violencia revolucionaria es sólo una cuestión de "autodefensa", como en la siguiente declaración: "Estamos dispuestos a hablar si el gobierno retira a sus fuerzas. La violencia no es parte de nuestra agenda. Nuestra violencia es contraviolencia. " ("Kishenji [Koteshwar Rao] Entrevista sobre la lucha armada, las conversaciones de paz y la democracia popular ", Tehelka revista, 13 de noviembre de 2009) Esta posición es compartida por las organizaciones de apoyo en otros países, que describen la lucha armada del pueblo de la India como mera autodefensa, pero evitan tomar posición sobre cuestiones de la lucha de dos líneas contra el revisionismo (el revisionismo armado incluido). Mientras que algunas declaraciones del PCI(M) (como la Carta Abierta de 2009, citada anteriormente) rechazan todas las ilusiones democrático-burguesas, hay declaraciones más recientes que expresan una posición diferente, apelando a la supuesta buena voluntad democrática de las clases dominantes e insisten en conversaciones de paz: “Incluso según las leyes formuladas por estas clases gobernantes, los derechos democráticos serían aplicables a nuestro partido. Por eso, la prohibición contra nuestro partido debería ser levantada. La prohibición contra nuestras organizaciones de masas debería ser levantada. Se debería crear oportunidades democráticas absolutas de movilización de masas. Solo en condiciones donde pudiéramos trabajar democráticamente, podemos ir a conversaciones.” (Entrevista con el camarada Ganapathy, Secretario General del Partido Comunista de India (Maoísta): “¡Nadie puede matar a las ideas de ‘Azad’! ¡Nadie puede detener el avance de la revolución!!, 2010) El PCP insiste en el firme rechazo y desenmascaramiento de todas las ilusiones democrático-burguesas, y en la necesidad de tomar una firme posición por la violencia revolucionaria, y no principalmente como autodefensa, sino como la manera de destruir el viejo Estado y construir el nuevo. Sí, es necesario y correcto condenar que la burguesía no siga sus propios principios, es necesario y correcto defender los derechos democrático-burgueses conquistados por el pueblo, y es necesario y correcto manejar formas legales de lucha, así como las ilegales - pero el punto primero y principal debe ser siempre rechazar de plano la idea de la democracia burguesa como un medio para la revolución y enarbolar el principio de la violencia revolucionaria, no como un "último recurso" o una manera de presionar a la clase gobernante, sino como parte fundamental de la más alta teoría y estrategia militar del proletariado internacional - la guerra popular. "Si la revolución exige violencia, autoridad, disciplina, estoy por la violencia, por la autoridad, por la disciplina. Las acepto, en bloque con todos sus horrores sin reservas cobardes" (José Carlos Mariátegui, fundador del Partido Comunista del Perú) “Los marxistas-leninistas-maoístas, pensamiento Gonzalo nos reafirmamos en la violencia revolucionaria como ley universal para tomar el poder y en que es medular para sustituir una clase por otra. Las revoluciones democráticas son con violencia revolucionaria, las revoluciones socialistas son con violencia revolucionaria y, ante las restauraciones recuperaremos el poder a través de la violencia revolucionaria y mantendremos la continuación de la revolución bajo la dictadura del proletariado con violencia revolucionaria mediante las revoluciones culturales y, al comunismo sólo iremos con la violencia revolucionaria y mientras haya un lugar en la Tierra en que exista explotación la acabaremos con la violencia revolucionaria.” (Línea internacional del Partido Comunista del Perú, 1988) “Lenin decía que Engels hizo el panegírico de la violencia revolucionaria, a un marxista, a un revolucionario si le corresponde. A un reaccionario le corresponde la alabanza del pacifismo, la mendaz paz de las bayonetas. Son dos posiciones, cada una tiene su paz y cada uno maneja su guerra. En el mundo hay un empeño desenfrenado para hablar de paz, de pacificación, de diálogo, desbordante desenfreno de posiciones burguesas y pequeñoburguesas del pacifismo más ramplón, estúpido veneno para envenenar a la clase, a las masas.” (III Pleno del Comité Central, Documento Central, PCP 1992) La pregunta entonces es, ¿los camaradas de India consideran esta forma de pacifismo una forma de "táctica" para atraer el apoyo de grupos e individuos pequeño burgueses y burgueses? Si ese apoyo se basa en los principios burgueses más que en proletarios, qué tipo de apoyo será? Si la política de un Partido Comunista se adapta a los principios democráticos burgueses y si este Partido se preocupa de respectar los “derechos humanos” burgueses, por miedo a ser calificados por la reacción de "terroristas", ¿qué dice eso acerca de la línea de ese partido? Ya hemos visto cómo el partido de Nepal obtuvo el apoyo de todo tipo de revisionistas y una amplia atención en los medios de comunicación reaccionarios internacionales - y cuanto más acuerdos de paz hicieron, tanto más vendieron la sangre del pueblo nepalés, tanto más "atención positiva" recibieron. En ese caso, todos sabemos que no tenía nada que ver con la "táctica" como Prachanda solía decir, sino todo que ver con la traición revisionista. Nunca ha sido más apropiada la famosa cita del Presidente Mao: “Sostengo que, para nosotros, es malo si una persona, partido, ejército o escuela no es atacado por el enemigo, porque eso significa que ha descendido al nivel del enemigo. Es bueno si el enemigo nos ataca, porque eso prueba que hemos deslindado los campos con él. Y mejor aún si el enemigo nos ataca con furia y nos pinta de negro y carentes de toda virtud, porque eso demuestra que no sólo hemos deslindado los campos con él, sino que hemos alcanzado notables éxitos en nuestro trabajo.” (Ser atacado por el enemigo no es una cosa mala sino una cosa buena, 26 de mayo de 1939). Llamamos a los camaradas de India a exponer sus posiciones con claridad y firmeza en el debate abierto. Nuestras críticas y nuestras preguntas no son, como los nuevos revisionistas afirman a veces, una expresión de "dogmatismo" o "nacionalismo peruano", pero en realidad son una expresión sincera de nuestro apoyo a la revolución en India y la defensa de los principios del proletariado internacional. El PCP en modo alguno desea imponer su política sobre cualquier otro Partido. El PCP rechaza la idea revisionista de "exportar la revolución", y sostiene que el Partido Comunista en cada país debe aplicar el maoísmo a las condiciones concretas de su propia revolución. Sin embargo, cuando el PCP señala que hay un plan reaccionario para desviar la atención de la revolución peruana (y difundir la patraña de que ha sido derrotado), lo hace porque entiende los motivos ideológicos y políticos detrás de ese plan a nivel mundial, y porque sabe que el plan imperialista de "acuerdos de paz" en la práctica significa más genocidio, más represión y más miseria para el proletariado y los pueblos del mundo. La guerra contrarrevolucionaria, todo su genocidio y su represión brutal, no se puede detener apelando a la empatía o la moral de los reaccionarios, o a las obras de caridad o solidaridad de los “hacedores de obras piadosas” pequeños burgueses de los países imperialistas - sólo puede ser detenida basándose en las masas más hondas y profundas y forjándolas en la violencia revolucionaria, desarrollando la guerra popular hasta el comunismo. |