¡Proletarios de todos los países, uníos! ¡VIVA EL NATALICIO DEL PRESIDENTE MAO TSE –TUNG!
(Presidente Mao Tse-tung, “A PROPÓSITO DE UN POEMA
El Movimiento Popular Perú eleva su saludo y sujeción plena e incondicional a nuestra jefatura, el Presidente Gonzalo, jefe del Partido y la revolución, el más grande marxista-leninista-maoísta viviente sobre la faz de la tierra, al heroico Partido Comunista del Perú, a su Comité Central y a todo el sistema de dirección partidaria. Así mismo, extiende su saludo a cada uno de los dirigentes, cuadros y militantes del Partido Comunista del Perú, como también a los combatientes del Ejército Popular de Liberación, a los Comités Populares y a las masas que trabajan con el Partido en el Perú y en el extranjero, y al pueblo en general, por el natalicio del Presidente Mao Tse-Tung. Este 26 de diciembre se cumplen 121 años del nacimiento del Presidente Mao Tse-tung, gran maestro del proletariado y cumbre del marxismo-leninismo. En él se concentra el desarrollo general del marxismo, que el Partido Comunista del Perú enarbola, defiende y aplica como “tercera, nueva y superior etapa del marxismo”, el maoísmo. Pese a quien le pese y aplastando las burdas intensiones de la reacción y el revisionismo (de viejo y de nuevo cuño), ha sido precisamente el Partido Comunista del Perú el que sancionó que: “[…] la todopoderosa ideología científica del proletariado, todopoderosa porque es verdadera, tiene tres etapas: 1) marxismo, 2) leninismo, 3) maoísmo; tres etapas, momentos o hitos de su proceso dialéctico de desarrollo; de una misma unidad que en ciento cuarenta años, a partir del Manifiesto, en la más heroica epopeya de la lucha de clases, en encarnizadas y fructíferas luchas de dos líneas en los propios partidos comunistas y la inmensa labor de titanes del pensamiento y la acción que solamente la clase podía generar, sobresaliendo tres luminarias inmarcesibles: Marx, Lenin, Mao Tse-tung, mediante grandes saltos y tres grandiosos hitos nos ha armado con el invencible marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente maoísmo de hoy.” (Documentos Fundamentales, 1988, Partido Comunista del Perú, Comité Central.) La magnitud e importancia del Presidente Mao Tse-Tung está fundada en sus invalorables aportes a la clase. Su vida y sus aportes los podríamos resumir en todos los hitos que jalonan una vida dedicada cabal y plenamente a la revolución:
En el Siglo XX el proletariado tuvo tres gigantescos triunfos; dos corresponden al Presidente Mao y si uno es suficiente gloria, dos lo son más. La otra es la Gran Revolución Cultural Proletaria (GRCP). Es precisamente ésta la que golpea en la médula del revisionismo y de los capituladores. De allí el visceral ataque y la miserable campaña que hay en su contra de parte de los mismos rufianes que saben que con ésta (y las sucesivas revoluciones culturales) se conjuran y aplastan las intentonas de restaurar este podrido y caduco sistema. Porque el Presidente Mao Tse-tung se abocó a sintetizar la experiencia de la revolución socialista sentando su gran teoría y práctica de la continuación de la revolución bajo la dictadura del proletariado encontrando la forma adecuada de desarrollarla mediante la GRCP: “Los representantes burgueses que se han infiltrado en el Partido, el Gobierno, el ejército y los diversos sectores culturales, son un grupo de revisionistas contrarrevolucionarios que se apoderarán del Poder y convertirán la dictadura del proletariado en dictadura de la burguesía sí se les presenta la oportunidad. A algunas de estas personas, ya las hemos calado; a otras todavía no. Y en algunas todavía confiamos y las preparamos para ser nuestros continuadores. Por ejemplo, gente tipo Jruschov todavía anida a nuestro lado”. “La presente Gran Revolución Cultural Proletaria es completamente necesaria y muy oportuna para consolidar la dictadura del proletariado, prevenir la restauración del capitalismo y construir el socialismo”. “La actual Gran revolución Cultural es sólo la primera y en el futuro habrá sin duda muchas otras. En la revolución el problema de quién vencerá a quién será resuelto en un largo período histórico. Si no se resuelven adecuadamente las cosas, en cualquier momento habrá posibilidad para una restauración capitalista”. “¡Revolucionarios proletarios, uníos para arrebatar el Poder al puñado de dirigentes seguidores del camino capitalista dentro del Partido!”. En este tiempo, en el que elementos indeseables quieren traficar con el maoísmo, hay que tener claro, para no dejarse sorprender, el triunfo real que significó para el proletariado la Gran Revolución Cultural Proletaria. Hay miserables revisionistas que enarbolan un maoísmo de membrete, mientras hay otros que quieren confundir a las masas con verborrea barata y con documentos espurios, mamotretos y patrañas con las que quieren relativizar u ocultar el verdadero significado de este hito histórico del Movimiento Comunista Internacional. El imperialismo está viviendo su crisis final y última. El imperialismo, principalmente la superpotencia hegemónica yanqui, trata de salir de su crisis con más guerra imperialista, más saqueo a los pueblos del tercer mundo y preparando un nuevo reparto del mundo. Mientras las masas se organizan y luchan en todo el mundo contra el imperialismo y la reacción. La expresión más alta de estas luchas es la guerra popular en el Perú dirigida por el PCP. El imperialismo sabe que no todo es disputa interimperialista, que no todo es lucha por mercados y zonas de influencia, por eso también trata de socavar la revolución en el mundo con el fin de que no se reconstituyan partidos comunistas marxistas-leninistas-maoístas donde no los hay, o donde ya hay Partido que no inicie guerra popular o acabe en “acuerdos de paz”. En este plan contrarrevolucionario es pieza clave el nuevo revisionismo que combate el maoísmo y niega lo fundamental de éste: el poder. El maoísmo como tercera, nueva y superior etapa del marxismo se ha forjado en combate contra el imperialismo, la última etapa del capitalismo, en medio de guerras mundiales, de la revolución proletaria y del movimiento de liberación nacional. En combate contra el troskismo, el revisionismo ruso del XX congreso, el revisionismo de Teng, Liu, Lin Piao, Hoxa y otros. Hay que resaltar que el Presidente Mao dirigió dos grandes cumbres e hitos de la revolución proletaria mundial del siglo XX: la revolución China (1949) y la Gran Revolución Cultural Proletaria (1966-1976) y fue reconocido como el más alto, consecuente y elevado cuadro y dirigente de la revolución china. Ha desarrollado tanto la filosofía marxista como la economía política y el socialismo científico. La Gran Revolución Cultural Proletaria golpeó el cuartel burgués contrarrevolucionario encabezado por Liu Shao-chi, el Jruschov chino, de quien fue lugarteniente Teng Siao-ping, “otro máximo elemento con Poder seguidor del camino capitalista dentro del Partido”; y también aplastó el cuartel contrarrevolucionario conspirador encabezado por Lin Piao. Así, se desarrolló la Gran Revolución Cultural Proletaria para consolidar la dictadura del proletariado, prevenir la restauración del capitalismo y construir el socialismo; y, cuya condensación se realizó en el IX Congreso del PCCH que es un gran hito en la historia del PCCH y del Movimiento Comunista Internacional. El desarrollo de la lucha de clases en China, la lucha entre capitalismo y socialismo, entre burguesía y proletariado y entre marxismo-leninismo-pensamiento Mao Tse-tung, ahora maoísmo, el revisionismo contrarrevolucionario y capitulacionista, se concretó en la gran campaña de crítica a Confucio y Lin Piao que ventiló el problema de restauración y contrarrestauración, el largo proceso de consolidación de una clase en el Poder que implica prevenir su recaptura por los reaccionarios y la consiguiente restauración y si se pierde pugnar por su reconquista; problema que se planteara en los inicios de la polémica contra el revisionismo de Jruschov y Brezhnev. Posteriormente, la lucha se centró en la cuestión decisiva y en la esencia misma del Poder, el problema de la dictadura del proletariado. El Presidente Mao dijo: “¿Por qué Lenin hablaba de la necesidad de ejercer la dictadura sobre la burguesía? Este problema es preciso tenerlo claro. La falta de claridad al respecto conducirá al revisionismo. Hay que hacerlo saber a toda la nación’’. “Lenin dijo: ‘La pequeña producción engendra capitalismo y burguesía constantemente, cada día, cada hora, de modo espontáneo y en masa’. Esto ocurre también con una parte de la clase obrera y una parte de los miembros del Partido. Tanto entre los proletarios como entre los funcionarios de los organismos oficiales hay quienes incurren en el estilo de vida burgués”. Estas tesis y las anteriores son, evidentemente, continuación y desarrollo de fundamentales planteamientos de! marxismo-leninismo. El Presidente Mao Tse-tung reiteró la vigencia de los planteamientos de Marx y Lenin sobre la larga transformación revolucionaría de la vieja sociedad; la necesidad de la dictadura del proletariado y su fortalecimiento; la incesante lucha de clases en el socialismo y de su extrema agudización en determinadas circunstancias; la subsistencia del derecho burgués y su restricción necesaria; la generación constante de capitalismo y burguesía y la posibilidad de restaurar el capitalismo usurpando el Poder; la persistencia de un “derecho burgués y de un “Estado burgués” que lo protege. Sentando, además, la necesidad de apuntar contra los seguidores del camino capitalista en el seno del Partido y continuar la revolución bajo la dictadura del proletariado mediante la revolución cultural. Así, la lucha se centró contra Teng Siao-ping, quien siguiendo a Liu Shaochi, el Jruschov chino, sostuviera la teoría de la extinción de la lucha de clases. El fallecimiento del Presidente Mao Tse-tung, como la muerte de todos los grandes dirigentes del proletariado generó profundas conmociones y amplías repercusiones en China y en el mundo; y, en las condiciones en que se desarrollaba la lucha en China, propició la coyuntura para que la derecha, tomando el control del Partido y dando un golpe de Estado, usurpara el Poder de la dictadura del proletariado, socavara las conquistas de la Gran revolución Cultural Proletaria y abriese las puertas a la restauración capitalista, a la capitulación y al revisionismo. Esto es historia. Y de esto hay que sacar lección. Por eso hay que tener claro que fue el presidente Gonzalo es el que asume la tarea de establecer el maoísmo como tercera, nueva y superior etapa del marxismo, y es, el mismo Presidente Gonzalo, quien es reconocido como jefe del PCP y la revolución en contundente lucha contra el nuevo y viejo revisionismo. Por esto, el imperialismo, la reacción y el revisionismo, de viejo y nuevo cuño, atacan y difaman al Presidente Gonzalo, al PCP, a su Comité Central y a la guerra popular en el Perú, con el propósito de que no ocurra la experiencia de los años 80 donde su ejemplo se difundió por el todo mundo. El nuevo revisionismo ataca tres pilares del maoísmo: Sobre el poder, el nuevo revisionismo es capitulación ante el imperialismo y la reacción. En Oriente Medio forma parte de la alianza del genocida Obama contra el islamismo radical, da justificación política a los bombardeos y genocidios del imperialismo yanqui y pone las tropas de infantería que los yanquis necesitan para llevar adelante su plan en esta zona del mundo. El viejo y nuevo revisionismo buscan acomodo dentro del nuevo reparto de la región junto a los islamistas moderados, formando parte del plan de la superpotencia hegemónica yanqui para la región. Sólo hay que ver que de la misma forma que Avakian y Prachanda y sus “síntesis” y "camino" forman parte de los planes del imperialismo, también Ocalan y su “nuevo municipalismo”, no es otra cosa que capitulación ante el imperialismo, y la reacción. Es la renuncia a la toma del poder, a la dictadura del proletariado y es desviar las luchas de las masas para que estas luchas apunten sólo abajo, a lo cotidiano, que no apunten al emperador, es decir al imperialismo y al Estado reaccionario. Por tanto el nuevo revisionismo combate lo principal del maoísmo: el Poder, poder para el proletariado. Forma parte del plan del imperialismo, principalmente de la superpotencia yanqui de que sean otras clases, y no el proletariado, las que dirijan las luchas de las masas. Sobre la jefatura, bajo el principio de que la guerra popular no se dirige desde las cárceles no se niega el principio de la jefatura. Toda revolución va generando jefes que inician o continúan la revolución. Es falso lo que afirma el nuevo revisionismo de que los problemas de la guerra popular son debidos a la jefatura. Lo real es que las revoluciones no avanzan de forma espontánea. Los comunistas nos organizamos jerárquicamente y militarizados sujetos al CC con una Base de Unidad Partidaria. El imperialismo y el revisionismo tratan de dinamitar a los Partidos maoístas bajo la tesis del “culto a al personalidad” con el objetivo de que se formen bandos, “caudillos” con opiniones particulares que rehúyen la lucha de dos líneas para hacer yuntas. Por tanto la guerra popular no ha tenido problemas por el principio de jefatura, sino más bien es lo que ha permitido mantener el rumbo de la Guerra Popular y que el partido marche unido como un puño. Sobre el pensamiento guía, que no es otra cosa que la aplicación del maoísmo a la realidad de cada país, el nuevo revisionismo trata de sustituir el maoísmo por las viejas prácticas del troskismo, levantar un marxismo en general y con la misma aplicación para todos los países. Es decir, un maoísmo muerto, sin aplicación concreta. Hoy, el maoísmo se expresa en su forma más alta en las guerras populares y principalmente en la guerra popular del Perú. El CC del PCP desarrolla la guerra popular en el Perú al servicio de la revolución proletaria mundial, sin ponerse a la cola de ninguna superpotencia o potencia imperialista. A nivel internacional combate el nuevo revisionismo de Avakian y Prachanda, principalmente, y todas sus convergencias. Combate el plan imperialista de “acuerdos de paz” (ver la LOD en el Perú y los casos de Irlanda, Sudáfrica, País Vasco, Colombia, Kurdistán, etc.) manteniendo en alto el principio de que “el Poder nace del fusil”. Por eso, reiteramos en nuestra denuncia para alertar a las masas para que estén vigilantes, y llamamos a los verdaderos revolucionarios a aplastar al nuevo y viejo revisionismo de forma implacable. A los nuevos revisionistas travestidos de “maoístas” se les identifica por ir en contra de la esencia del maoísmo:
El imperialismo quiere levantar partidos “maoístas” de engendro, quebrar el campo revolucionario poniendo en la contienda al revisionismo armado “maoísta” y sus “gobiernos maoístas”. Esta peculiaridad de la lucha va a ser cruenta, donde las cabezas del nuevo revisionismo y sus compinches y mascarones de proa van a cumplir su nefasto papel (papel que, lo repetimos, le ha asignado el imperialismo yanqui) de estafadores, traficantes y criminales, con la infame intención de ofertar, subastar y liquidar vilmente las luchas de los pueblos del mundo, con el macabro fin de vender la revolución sin reparar en los costes: delaciones, soplonaje, chalaneo, y, por tanto, genocidios y masacres contra los pueblos que se subleven y enarbolen las implacables banderas de la lucha de clases. Todo esto para que no avance la Nueva Gran Ola de la Revolución Proletaria Mundial que día a día dirige sus pasos, forja a sus masas, alista a sus combatientes, hacia la guerra popular, teoría militar del proletariado, la más alta forma de lucha sancionada y revalidada por el Presidente Mao Tse-tung. ¡VIVA EL NATALICIO DEL PRESIDENTE MAO TSE –TUNG! Movimiento Popular Perú |