¡Proletarios de todos los países, uníos! INTERVENCIÓN DEL MOVIMIENTO POPULAR PERÚ EN LA CONFERENCIA INTERNACIONAL EN BARCELONA, 3 DE NOVIEMBRE DE 2017 El Movimiento Popular Perú, organismo generado del Partido Comunista del Perú para el trabajo en el extranjero, expresa sus calurosos saludos comunistas a los compañeros presentes en esta Conferencia Internacional, la cual se realiza como parte de nuestra celebración del centenario de la Revolución de Octubre. Partimos de nuestro saludo y sujeción plena, firme, voluntaria y consiente a nuestra Jefatura el Presidente Gonzalo, Jefe del Partido y la revolución, centro de unificación partidaria y garantía del triunfo hasta el Comunismo, a nuestra todopoderosa ideología el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento gonzalo, principalmente el pensamiento gonzalo para la revolución en Perú, y al heroico combatiente el Partido Comunista del Perú y su Comité Central, que hoy sigue dirigiendo la guerra popular bajo condiciones complejas, aplicando el pensamiento gonzalo para resolver los problemas nuevos. Así el Partido está movilizando a las masas para retomar lo perdido en medio de la guerra popular y en lucha a muerte contra las líneas contrarias: la línea oportunista de derecha (LOD), revisionista y capitulacionista, y la línea oportunista de "izquierda" y su revisionismo armado; líneas revisionistas que se han estructurado en colaboración directa con el imperialismo y la reacción. Celebramos este centenario junto con toda nuestra clase el proletariado internacional, con los pueblos oprimidos y con todos los comunistas y revolucionarios en el mundo, celebrando no solamente el aniversario de una revolución triunfante, sino destacando su trascendencia como está establecida en la Línea Internacional de nuestro Partido: “Con el triunfo de la Revolución de Octubre, 1917, se marca un hito extraordinario en la historia mundial, el término de la revolución burguesa y el comienzo de la revolución proletaria mundial. Esta nueva era signada por la potenciación de la violencia expresa la caducidad de la burguesía para dirigir la revolución y la madurez del proletariado para tomar, dirigir y mantener el Poder de la dictadura del proletariado; dentro de la cual se enmarcan también las revoluciones de las naciones oprimidas.” En este contexto vamos a hacer un breve resumen de la situación actual de la guerra popular en el Perú, para después continuar con algunos puntos sobre la situación internacional. El Partido Comunista del Perú y su Comité Central hoy está enfrentando una situación compleja dentro del recodo y la inflexión que resultó de la detención del Presidente Gonzalo en 1992 y la estructuración - fuera del Partido - de la línea oportunista de derecha. Toda la patraña de los "acuerdos de paz", montada por las ratas de la LOD bajo la dirección del imperialismo yanqui y la reacción peruana, fue aplastada por el Partido y las masas con la guerra popular, que no se ha detenido un solo instante. Pero pese a eso, la patraña y los problemas del recodo tuvieron repercusiones a nivel nacional así como internacional. En medio de la lucha del Partido para forjar dirección y unir al Partido mismo persistiendo en la guerra popular, y del proceso de la reorganización del Partido establecida por el CC el 95, surgieron las posiciones militaristas, anti-maoístas y anti-pensamiento gonzalo que se estructuraron en torno a 2011 como línea oportunista de izquierda (LOI), encabezada por los hermanos Quispe en colaboración directa con el imperialismo y la reacción. Estos traidores, que abiertamente reniegan y atacan al Presidente Gonzalo y su pensamiento, hoy desarrollan un revisionismo armado, acciones erráticas no para conquistar el Poder para el proletariado y el pueblo, sino para conseguir una mejor posición dentro del viejo orden. En 2011, estos miserables lograron usurpar algunos aparatos del Partido y del Ejército Popular de Liberación, llevando a la situación compleja en la cual el Partido y la guerra popular se encuentran hoy. En esta situación, el Partido, su Comité Central, sus Comités regionales y los demás organismos partidarios están asumiendo firmemente la tarea de mantener el rumbo de la revolución, desarrollando el trabajo de masas en el campo y la ciudad, participando en y dirigiendo a las luchas reivindicativas de las masas en medio de la guerra popular para retomar lo perdido y superar el recodo. Lo concreto es que los golpes del imperialismo, la reacción y el revisionismo no han logrado su objetivo contrarrevolucionario de aniquilar la dirección proletaria y la guerra popular. El Partido hoy cuenta con un Comité Central forjado por el Presidente Gonzalo y en la guerra popular, y así está capaz de seguir dirigiendo todos sus aparatos y la guerra popular omnímodamente y asumiendo también su papel de fracción roja en el movimiento comunista internacional. Desde los años 80, el PCP ha estado a la vanguardia en la defensa del maoísmo y la lucha contra el revisionismo en el movimiento comunista internacional, desenmascarando el nuevo revisionismo de Avakian y Prachanda – desde mucho antes de que se consumara la traición - e insistiendo en la lucha implacable contra la conciliación y las convergencias con el revisionismo. El Partido hoy llama a todos los Partidos y organizaciones del MCI a participar en el debate abierto y honesto sobre la aplicación del maoísmo y la situación internacional, aplastando el revisionismo para poder unir a los comunistas del mundo en torno a una línea general proletaria. La presente Conferencia organizada por el MPP es precisamente parte de esta tarea. En cuanto a la situación internacional queremos destacar los siguientes puntos: 1. la contradicción principal hoy en el mundo sigue siendo la contradicción entre el imperialismo (las superpotencias y potencias) y las naciones oprimidas, y el tercer mundo es la base de la revolución mundial. Las demás contradicciones fundamentales, la contradicción proletariado-burguesía y la contradicción interimperialista, también se están agudizando y cualquiera de estas "puede ser principal según la circunstancia específica de la lucha de clases, transitoriamente o en determinados países". 2. A nivel mundial se expresa la colusión y pugna entre las tres superpotencias, el imperialismo yanqui, el imperialismo chino y el imperialismo ruso, para repartirse el mundo. El proceso de repartición ya está en marcha, expresándose en la agresión imperialista contra los pueblos oprimidos y la guerra interimperialista llevada a cabo a través de otros Estados y grupos armados, al mismo tiempo que se preparan para una tercera guerra mundial directa entre las superpotencias. 3. Estamos en la etapa de la ofensiva de la revolución proletaria mundial y la crisis general y última del imperialismo. Dentro de este periodo enfrentamos todavía la ofensiva contrarrevolucionaria general del imperialismo, de la cual el revisionismo forma parte; pero no pueden ocultar la realidad: que la revolución es la tendencia histórica y política principal y que se expresa una situación revolucionaria en desarrollo desigual en el mundo. Es decir que el imperialismo – todas las superpotencias y potencias imperialistas – hoy enfrentan su necesidad inevitable de repartirse el mundo entre ellas en la contienda por la hegemonía mundial, lo que inevitablemente significa más guerra genocida de rapiña. Al mismo tiempo todos los imperialistas se coluden en la tarea reaccionaria e imposible de salvar el sistema imperialista moribundo en su conjunto, es decir de aplastar la revolución. Estos chupasangres están bien conscientes de que sus guerras riegan el odio de las masas, generando más rebelión, más revolución; que sus guerras, como dice el PCP, repercuten “en contra de los imperialistas y las razones para que las naciones oprimidas, los pueblos y la clase se levanten en guerra popular serán mayores”. En síntesis, el problema que los imperialistas enfrentan hoy es como realizar la repartición del mundo y al mismo tiempo evitar que los pueblos se unan contra ellos, y este problema principalmente consiste en evitar que el proletariado asuma plenamente su papel de dirigir la revolución y las luchas de los pueblos oprimidos por la liberación nacional. Todas las superpotencias y potencias imperialistas hoy utilizan el liberalismo, el fascismo y el revisionismo para movilizar a diferentes sectores de las masas en función de la repartición y la contrarrevolución. En los países imperialistas difunden el chovinismo con el mito de la “libertad” y la “democracia occidental” junto con el racismo abierto, basándose en la pequeña burguesía y la aristocracia obrera para movilizar a las masas en favor de la guerra imperialista y la dictadura burguesa, contra los pueblos oprimidos y el proletariado. El imperialismo yanqui así como el imperialismo ruso y chino y las potencias europeas fomentan el racismo contra los pueblos árabes y los inmigrantes con una campaña global “contra el islamismo” y “contra el terrorismo” para legitimar su agresión en el Medio Oriente y la represión en los países imperialistas. Así buscan manejar la opinión pública mientras simultáneamente militarizan sus Estados cada vez más, intensificando la represión violenta en nombre de la defensa de la “democracia”. En los países oprimidos sus esfuerzos apuntan a dividir a los pueblos y poner masas contra masas, utilizando contradicciones nacionales y religiosas para convertir las luchas populares y antiimperialistas en fichas de ajedrez sirviendo a la repartición imperialista, como vemos en el Medio Oriente donde el imperialismo yanqui emplea el Estado Islámico así como las fuerzas kurdas como mercenarios para tomar el control de la región, y el imperialismo ruso se basa en regímenes lacayos como el de Assad en Siria. En los países imperialistas así como en los países oprimidos, el revisionismo tiene un papel central en estos planes del imperialismo. Algunos de los revisionistas – en forma velada o abierta – se sujetan al imperialismo yanqui y sus aliados imperialistas en Europa, promoviendo la “democracia occidental”, el liberalismo y el reformismo socialfascista o “municipalista” y presentando al “confederalismo democrático” del PKK/PYD como un supuesto “modelo revolucionario” para el mundo. Otros se unen con el imperialismo ruso y chino y su demagogia del “mundo multipolar”, utilizando el odio justo de los pueblos contra el imperialismo yanqui para promover los intereses de las otras superpotencias y potencias, y presentan regímenes reaccionarios y fascistas como el Chavista en Venezuela como ejemplos a seguir para los pueblos del mundo. No importa si se llaman “Podemos”, “Syriza”, “marxistas-leninistas”, trotskistas o “socialistas libertarios”: lo que todos los revisionistas tienen en común es que traicionan al proletariado y sirven directamente a una u otra superpotencia o potencia imperialista, así como los revisionistas de la II Internacional pocos años antes de la Revolución de Octubre. Y al igual que ellos, los revisionistas de hoy declaran su lealtad a la dictadura burguesa, abjuran de la violencia revolucionaria y rechazan la destrucción del viejo Estado y la construcción del nuevo Estado. En nuestra colina, la colina del proletariado internacional y los pueblos oprimidos, vemos hoy como se confirma cada vez más lo que el Presidente Gonzalo nos enseña, que el maoísmo, encarnándose en los pueblos del mundo, marcha inconteniblemente a comandar la nueva gran ola de la revolución proletaria mundial. Las guerras populares y luchas armadas bajo la bandera del maoísmo avanzan contra viento y marea en Perú, en India, en Filipinas y en otros lugares, donde miles y miles de obreros y campesinos heroicamente y conscientemente están dando sus vidas por destruir lo viejo y construir lo nuevo bajo la dirección de sus Partidos Comunistas. También vemos como estas guerras populares repercuten en todo el mundo con la formación de nuevos Partidos y organizaciones maoístas, incluso en los países imperialistas. Eso, junto con todas las demás luchas heroicas del proletariado y de los pueblos oprimidos, es confirmación innegable de que estamos en la ofensiva de la revolución mundial. Como decía el Presidente Mao: “las perspectivas son luminosas, pero el camino es sinuoso”. Para los comunistas, los marxistas-leninistas-maoístas, no cabe ver solo lo positivo y no ver los problemas, la contradicción. Tras la bancarrota del nuevo revisionismo de Avakian y Prachanda y la disolución del MRI, el movimiento comunista internacional se encuentra en una situación de dispersión. Aunque la mayoría de los Partidos y organizaciones maoístas han denunciado el revisionismo de Avakian y la traición de Prachanda y sus seguidores en Nepal, quedan divergencias y obscuridades que no han sido resueltas. Muchos camaradas dirigentes solo quieren hablar de la “unidad” de los maoístas, pero no de las divergencias; y algunos incluso continúan la negra campaña de Avakian de aislar y difamar al PCP con la misma palabrería revisionista de “dogmatismo” y “culto a la personalidad” para evitar el debate. Otros simplemente se callan y quieren ser amigos de todos, y por eso no toman posición sobre puntos decisivos para la revolución. Mientras hay varios Partidos y organizaciones en el mundo que hoy reconocen las contribuciones universales del Presidente Gonzalo al marxismo, un partido como el Partido Comunista de India (Maoísta) simplemente evita por completo el tema del PCP, el Presidente Gonzalo y la lucha contra el revisionismo en el MRI cuando hace su síntesis de la historia del MCI y del marxismo-leninismo-maoísmo. Cuando los marxistas-leninistas-maoístas llamamos a desarrollar la lucha de dos líneas en el MCI, aplicando el método marxista de la crítica y autocrítica, algunos nos acusan de “atacar” a otros Partidos y organizaciones. Así se expresa en el MCI una tendencia a la conciliación y al liberalismo, contra la cual los comunistas debemos insistir en la lucha implacable contra el revisionismo como peligro principal para poder unirnos a nivel mundial e iniciar y desarrollar las guerras populares hasta la victoria. Hay muchos puntos importantes que se necesitan debatir en el MCI: la validez universal del maoísmo y la guerra popular para los países imperialistas así como países oprimidos, la militarización de los Partidos Comunistas, la lucha contra el cretinismo parlamentario y los “acuerdos de paz”; estos son algunos de los más importantes. Pero ahora vamos a centrar en el problema urgente del revisionismo como agente de las superpotencias y potencias imperialistas para socavar y manipular a las luchas justas de la clase y de los pueblos apuntando a aniquilarlas, neutralizarlas o convertirlas en fichas de ajedrez en la repartición del mundo; y principalmente como el revisionismo se expresa dentro de los mismos Partidos Comunistas marxistas-leninistas-maoístas. Como el Presidente Gonzalo nos enseña: “[los revisionistas] han traicionado la revolución mundial y traicionan la revolución en cada país, a la clase y el pueblo, porque servir a superpotencias o potencias imperialistas, servir al revisionismo especialmente al socialimperialismo, ir tras bastón de mando, ser fichas de ajedrez en el juego por el dominio del mundo es traicionar a la revolución." Contrario a los principios marxistas-leninistas-maoístas, algunos de los Partidos del MCI hoy están vacilando o evitan tomar posición clara sobre el carácter y el papel del imperialismo chino y ruso. Algunos, como la dirección del Partido Comunista de India (Maoísta), hablan vagamente de un “frente antiimperialista internacional” contra el imperialismo yanqui, pero hasta lo que sabemos no han tomado una posición clara frente al imperialismo chino y ruso. En el caso del Partido Comunista de Filipinas (PCF), sus dirigentes invitan abiertamente al imperialismo chino a “invertir” en Filipinas y “colaborar” con el viejo Estado filipino, lo que supuestamente va a crear condiciones para “reformas sociales” en el país. El PCF, mientras continua la guerra popular contra el viejo Estado, al mismo tiempo insiste en las “conversaciones de paz” y abiertamente promueve la supuesta posibilidad de una “solución pacífica” a través del viejo Estado, en un supuesto frente único con la gran burguesía compradora, totalmente sujetada al imperialismo. Esta revisión descarada del marxismo, que incluso presentan bajo el membrete del maoísmo, está directamente ligada a su posición frente al imperialismo: según las declaraciones del PCF, solo hay un imperialismo y es el imperialismo yanqui. Así el PCF, como varios grupos de revisionistas en el mundo, en realidad plantean una nueva versión de la tesis del traidor revisionista Teng Hsiao-ping: un llamado “frente” en el cual el proletariado y los pueblos deben unirse con las demás superpotencias y potencias contra el imperialismo yanqui. En síntesis, es una política para vender la revolución, la preciosa sangre de las masas, por un plato de lentejas; para capitular y lograr puestos dentro del viejo sistema para un puñado de dirigentes llamados “maoístas”, así como en el caso de las ratas de la LOD en Perú y con Prachanda y sus seguidores en Nepal. Para los marxistas-leninistas-maoístas, principalmente maoístas, lo que corresponde es reafirmarse en lo establecido por el Presidente Gonzalo en 1988: "Así el socialimperialismo de la URSS en el mundo desarrolla un protervo plan para convertirse en superpotencia hegemónica usando todos los medios a su alcance: entre los cuales hay que destacar el mantenimiento de falsos partidos, comunistas de membrete, 'partidos obreros burgueses' como decía Engels. Y de igual manera actúa el revisionismo chino y todo revisionismo según sus condiciones y bastón de mando que siguen." E insistimos en lo planteado por el Comité Central del PCP en diciembre de 2016: "Hoy estamos viviendo el periodo de contienda entre el imperialismo norteamericano, ruso y chino; hoy así están definidos los tres enemigos principales a nivel mundial, para los que desenvolvemos revolución democrática o socialista con guerra popular y también para los movimientos nacionalistas. Lo que corresponde es que cada revolución o movimiento especifique su enemigo principal y conjurar el dominio de la otra superpotencia o de las demás potencias." En síntesis: la tarea de los comunistas en cada país es combatir a su enemigo imperialista principal basándose en las masas, no en acuerdos con otras superpotencias y/o potencias. En la revolución democrática de los países semicoloniales y semifeudales, los comunistas tienen que unir a las clases del pueblo bajo la dirección del Partido Comunista contra el imperialismo, el capitalismo burocrático y la semifeudalidad. En los países imperialistas, el enemigo principal es el Estado imperialista. Las burguesías imperialistas, compradoras y burocráticas y sus viejos Estados no pueden ser aliados – son los blancos de la revolución. Cada Partido debe aplicar la independencia, la autodecisión y el autosostenimiento para nunca ser ficha de ajedrez de nadie, tiene que avanzar en lo ideológico para comprender la situación revolucionaria y desarrollar campañas de rectificación para mantener el rumbo de la revolución. La tarea de los comunistas hoy en el mundo es constituir o reconstituir los Partidos Comunistas como Partidos marxistas-leninistas-maoístas militarizados donde estos no existen, para que inicien y desarrollen la guerra popular en cada país hasta el comunismo, y en que estas guerras populares confluyan en una guerra popular mundial contra la guerra mundial imperialista. En cuanto a las luchas de liberación nacional de los países oprimidos, destacamos que el punto decisivo es que tienen que ser dirigidas por el proletariado con sus Partidos marxistas-leninistas-maoístas para poder triunfar y no ser manipuladas y utilizadas por los imperialistas. Apoyamos a los movimientos nacionalistas siempre y cuando formen parte de la lucha contra el imperialismo, no por el nacionalismo en sí. En las palabras del Partido Comunista de China de 1963: “La concepción del mundo del partido proletario en relación con el problema nacional es el internacionalismo, y no el nacionalismo”. Llamamos a todos los comunistas y revolucionarios a denunciar y aplastar la tesis revisionista de que el imperialismo es “fuerte” y las fuerzas revolucionarias “débiles”, tesis que solo sirve a justificar las “alianzas” y los “acuerdos” con el imperialismo y la reacción, y no corresponde a la realidad. Los comunistas enarbolamos la consigna del Presidente Mao, que todos los reaccionarios no son más que tigres de papel, y desenmascaramos y denunciamos como los imperialistas desarrollan la repartición del mundo, desarrollando e implementando el fascismo con el chantaje nuclear. Y finalmente llamamos una vez más a los comunistas y revolucionarios del mundo a rechazar la conciliación, ir contra la corriente y movilizar a las masas para cañonear el cuartel general del revisionismo. ¡VIVA EL MAOÍSMO, ABAJO EL REVISIONISMO! Movimiento Popular Perú |